Por el Alferez D. Manuel de Baroja Fernandez de Jubera, preso en la real carcel de esta Corte, por la causa que se le ha hecho, de officio de la real justicia, sobre el arrojo, que se executó con gente armada en la casa de D. Diego del Corro, cargador de flota, y residente en ella, para robarlo; y porque se halla por sentencia de vista de la Real Sala del Crimen de esta Nueva-España, condenado en la pena de el ultimo suplicio, con la calidad de deguello, y de que se pide con la reverencia debida revocacion