Describir: Oración que en las honras funerales del Sr. Don Fernando Davila de Madrid, colegial real del mas Antiguo de San Ildefonso de Mexico, y meritissimo oydor de la Rl. Audiencia de Manila, difunto en 28 de marzo de 1762. Decia en la Iglesia de la Compañia de Jesus en el 1 de Abril del mismo año el M. R. P. Francisco Xavier Puch, professo de la misma Compañia, maestro de prima de theologìa en su Colegio Maximo de Manila. Diolo a la luz publica para comun edificacion el Illmo. Sr. Dr. Don Manuel Antonio Roxo del Rio y Vieyra, del Consejo de S. M. Arzobispo, governador, y capitan general de las Philipinas, y presidente de su Real Audiencia, quien lo dedicò al Real y Supremo Consejo de las Indias