Descripción de la noticias: | Entre los antiguos egipcios y romanos ya se tenía la práctica de borrar la existencia de un personaje non grato, quitándolo de todo aquel registro público existente, incluyendo inscripciones en edificaciones y monumentos. Con ello se cercioraban, de cierta manera, que su memoria, cualquiera que fuese, quedara vacía y con el tiempo, en el olvido.
Los que realizaron dichas acciones no contaron que también la ausencia de información es indicativa de que sí existió el registro, y que posiblemente se pueda hallar mención del hecho o el personaje en otros lados. Tal parece que esto mismo ocurre con los documentos del conflicto israelí-palestino. |