| Descripción de la noticias: | El patrimonio industrial de México, así como el documental, que corre paralelo a este, han sido la veta en la que Belem Oviedo Gámez y Marco Antonio Hernández Badillo han explotado durante tres décadas de su vida.
En la tertulia denominada Treinta años de rescatar, preservar y poner en valor la herencia histórica-cultural del Distrito Minero de Real del Monte y Pachuca, presentada por Belem Oviedo, directora del Archivo Histórico y Museo de la Minería, ubicado en Pachuca, Hidalgo, envolvió a sus asistentes con una charla sobre las labores de rescate y conservación que se han desarrollado desde hace tres décadas, no sólo en el Archivo Histórico, sino también en las minas que fueron cedidas para tal fin.
El trabajo de rescate, tanto en los museos de sitio de la Mina de Acosta, Mina La Dificultad, y el Museo de Medicina Laboral, surgió de proyectos derivados de un original que fue el Archivo Histórico y Museo de la Minería. Dichas actividades son el reflejo de una época pasada que no regresará, al igual que las vetas explotadas de cada mina, que son y fueron el sustento de miles de mineros a lo largo del tiempo, así como de sus familias, y que ahora toca a los descendientes y otrora trabajadores de las minas, custodiar y resguardar para la posteridad.
El grupo de trabajo inicial que inauguró el proyecto, confiesa la ponente, no tenía idea del desarrollo del trabajo minero, pero tampoco del archivístico. Su labor casi fue la de un minero, pues para sacar los expedientes de los talleres en donde estaban amontonados, se tuvo que usar el mismo equipo de seguridad que los trabajadores del lugar.
Posteriormente, con la venta de la minas, el destino de las mismas se veía incierto, sin embargo los nuevos propietarios dueños se preocuparon porque existiera una continuidad en el rescate del patrimonio documental y llegó un momento que de tres personas pasaron a 16 solamente en el archivo. |
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